lunes, 6 de febrero de 2012

Manos Unidas

MANOS UNIDAS: LATIDOS DE ESPERANZA, Campaña 2012.

LATIDOS DE ESPERANZA


El objetivo de la detención y reducción de las graves enfermedades que azotan a las zonas del mundo menos favorecidas ha de ser el resultado de un proyecto común de toda la sociedad. Una sociedad solidaria basada en el apoyo y la cooperación de cada individuo.
La aportación de cada uno de nosotros supone una inyección de vitalidad al proyecto. La utilización del estetoscopio como símbolo de la prevención en la salud, unido a la representación gráfica de la tierra, subraya la idea de que todos nuestros esfuerzos funcionan como uno solo, como un gran latido que aporta vida a nuestro mundo. Si no sumamos todos, el latido será débil y se apagará, igual que se apaga una vida.
Los colores utilizados, vivos e impactantes, buscan captar la atención del receptor del mensaje, imprimiendo frescura y dinamismo al conjunto. Los tonos magentas y violetas son colores de un alto valor espiritual, aunque con un marcado sentido práctico, asociados a los valores de compromiso, cooperación, bondad y sensibilidad, en contraposición al blanco que simboliza la protección.
Por último, la tipografía remarca el lema, dividiéndolo gráficamente para una mejor asimilación del mensaje.
Manuel Sayar Costales (Autor del cartel)


INFÓRMATE EN: http://www.manosunidas.org/



"Tu amor nos limpia" (6TOB por Fano)




Mc 1,40-45
Como el enfermo de lepra del Evangelio, queremos acercarnos a Jesús para que nos limpie, lave, sane nuestras heridas. La lepra es horripilante a la vista. En la Semana de Manos Unidas recordamos tantas lepras, lacras de nuestro mundo: las injusticias que llevan a la desigualdad, la falta de compartir que lleva al hambre, el egoísmo que cercena la vida de los más débiles…¡Señor, Tú puedes limpiarnos! Eres el único que puede liberarnos de las costras del aburguesamiento, de la vida fácil, cómoda e insolidaria. Manos Unidas para el Tercer Mundo y Manos Unidas para transformar nuestra sociedad. Cada día en Cáritas, de tantas parroquias, son más largas las filas de personas que vienen a pedir. ¡Qué pena que existan colas para solicitar una ayuda! Ojalá Manos Unidas, para allá y para acá, nos motive a arrojarnos a la presencia de Jesús, a la presencia de los hermanos, para ser sanados de la enfermedad de la falta de compasión con los que más sufren.El agua del Corazón de Cristo sana todas nuestras enfermedades, si nos acercamos a Él, como el enfermo del Evangelio.